En el corazón de esta vivienda encontramos una cocina creada para convertirse en el auténtico eje del hogar. Su diseño combina elegancia, funcionalidad y calidez, un espacio abierto que conecta de forma natural con el comedor y el salón.
El mobiliario, con frontales en acabado negro mate y madera natural, aporta un perfecto equilibrio entre sofisticación y naturaleza. La isla central, revestida de porcelánico oscuro con vetas, invita tanto a cocinar como a compartir momentos, gracias a la barra integrada con capacidad para varios comensales.
La iluminación juega un papel esencial: las vitrinas superiores retroiluminadas realzan cada detalle y dotan una atmósfera acogedora al conjunto, mientras que los puntos de luz suspendidos sobre la isla crean un ambiente moderno y dinámico.
Cada elemento está pensado para ofrecer la máxima practicidad sin renunciar al diseño: electrodomésticos integrados, almacenamiento oculto y soluciones inteligentes que hacen de la cocina un espacio ordenado, versátil y preparado para el día a día.
Más que un lugar donde cocinar, esta cocina es un punto de encuentro, un espacio para vivir y disfrutar, diseñado a medida por Cocinas Fernández para reflejar la personalidad y el estilo de quienes habitan en ella.